Los sindicatos califican de «lamentable» el estado de los centros de salud

Los sindicatos con representación en la mesa sectorial del Área de Gestión Sanitaria (AGS) del Campo de Gibraltar (UGT, SMC, Satse, CC. OO. y USAE) denunciaron ayer la situación de los centros de salud en el Campo de Gibraltar, que tacharon de «lamentable». Según los sindicalistas, el funcionamiento de los centros afecta tanto a los profesionales como a los usuarios.
En primer lugar, sostienen que la falta de sustituciones «de todos los profesionales, que comenzó de forma puntual en periodos vacacionales», se ha generalizado durante todo el año. Así, afirman que la acumulación de consultas y de pacientes es habitual en todos los centros, lo cual supone, dicen, el incumplimiento de todos los acuerdos. Todo ello conlleva «situaciones de estrés en los profesionales y de descontento entre los usuarios».
Agresiones
Los sindicatos también acusan la «denegación sistemática» de los permisos reglamentarios, así como el aumento de presión asistencial, las sobrecargas de trabajo y la escasez del tiempo del que disponen los profesionales para atender a los usuarios, «a veces inferior a cinco minutos por paciente».
Según los denunciantes, los programas de salud no funcionan adecuadamente por la falta de profesionales, lo cual ocasiona una «gran fuga» de médicos y personal de enfermería fuera del AGS.
Los sindicalistas afirman que el malestar existentes se traduce en un incremento de las agresiones físicas y verbales a todos los profesionales a todos los profesionales. En este sentido, reclaman la presencia de vigilantes de seguridad a jornada completa.
Por último, indican que en el AGS hay poblaciones que padecen un especial aislamiento, que están desprovistas de dispositivo móvil de urgencia y a las que tampoco llega el 061 de forma regular. Por estas razones, los sindicatos exigen al gerente del AGS, a los responsables del SAS y al delegado de Salud de Cádiz que adopten las medidas necesarias para que estas cuestiones se solucionen «de manera definitiva»

Los sindicatos con representación en la mesa sectorial del Área de Gestión Sanitaria del Campo de Gibraltar -UGT, SATSE, CCOO y USAE- denunciaron ayer la "lamentable situación" de los centros de salud de la comarca que, según afirman, no afecta ya sólo a los profesionales sanitarios sino también salpica a los usuarios de estos centros.

Señalan como principal culpable de esta situación a la falta de personal. La escasez de sustituciones de todos los profesionales dicen ha dejado de ser puntual en periodos vacacionales y "se ha generalizado actualmente durante todo el año" lo que provocan "importantes acumulaciones de pacientes" en las salas de espera. Esto, según los propios sindicalistas, provoca una sobrecarga de trabajo lo que conlleva a su vez a una "reducción en los tiempos de atención al paciente" y el consiguiente descontento.

Además creen que esta problemática conlleva al malestar de los usuarios del sistema sanitario y, en ocasiones, a agresiones verbales y físicas contra los profesionales sanitarios. Ante esto exigen la presencia de vigilantes de seguridad en todos los centros a jornada completa.

Otra de las quejas de los representantes de los trabajadores es que en el área sanitaria "existe algunas poblaciones con especial aislamiento desprovistas de dispositivo móvil de urgencias y a donde tampoco llega el 061 de forma regular.

Otro de los puntos denunciados por los trabajadores en comunicado de prensa ha sido la denegación "sistemática" de permisos reglamentarios.

Ante lo que considera una "situación precaria" exigieron ayer al gerente del Área de Gestión Sanitaria así como al delegado de Salud provincial y responsables del Servicio Andaluz de Salud (SAS) que tomen medidas necesarias y oportunas para que estas situaciones se solucionen de manera definitiva, lo cual redundará en una mejora de la calidad asistencial del usuario como en la salud laboral de todos los profesionales.

Los sindicatos sanitarios CC. OO., CSI-CSIF, SATSE, SMA, UGT y USAE expresaron ayer en nota de prensa que «es el momento de que los ciudadanos de La Línea se movilicen para que el hospital no sea definitivamente desmantelado como paulatina y veladamente se está realizando». Próximamente tienen previsto reunirse con la Plataforma y otros colectivos, «para aunar esfuerzos y realizar los preparativos necesarios para conseguir la implicación de la ciudadanía».
Por otro lado, recordaron que hace dos años Francisco Martos, gerente del Área de Gestión Sanitaria del Campo de Gibraltar, e Hipólito García, delegado provincial de Salud, «se comprometieron públicamente a realizar las reformas necesarias para abrir una unidad de hospitalización en la cuarta planta».
Actualmente en esa zona del centro sanitario «sólo hay desorden y acumulación de camas viejas, y lo más que han hecho los albañiles ha sido arreglar los techos y la capilla».
Hace unos días los sindicatos denunciaron la existencia de una especie de unidad virtual en el servicio de Urgencias. «Los pacientes están demasiados días en Urgencias, ya que no pueden ser absorbidos por la planta de medicina interna. Sin embargo, la única intención de los responsables sanitarios del Área de Gestión Sanitaria y del Hospital de la Línea es maquillar las cifras».
Agravio comparativo
En su comunicado de prensa exponen que «esta situación vuelve a poner de manifiesto la parasitación que se está realizando de los recursos del Hospital de La Línea, que son utilizados para mejorar los resultados globales del Área o para derivar esos recursos a otros sitios que no son el hospital, con el consiguiente agravio comparativo para los ciudadanos de La Línea».
Una vez más, los sindicatos insistieron en su denuncia pública de «la precariedad tanto en las instalaciones, como en los recursos existentes por no decir inexistentes, así como la fuga de profesionales».
Periódicamente se van denunciando en la prensa unas situaciones que «están dinamitando al Hospital de La Línea, con unas instalaciones tercermundistas, con las repercusiones que esto conlleva en relación con la asistencia sanitaria prestada a los ciudadanos. Toda esta situación es responsabilidad directa de Francisco Martos y su equipo, a los que sólo les interesan los resultados».